Una reflexión sobre
creyentes y escépticos
Discusion-
The Amazing Meeting es un congreso organizado por la Fundación
Randi, que desde 2003 se viene celebrando anualmente. En el de 2010 estuvo
invitado Phil Plait, de Bad Astronomy, y en su exposición habló de algo que
sigue de actualidad: ¿cuál es la manera correcta en la que un escéptico debe
transmitir su mensaje? No había visto su intervención hasta ahora, y tengo que
confesaros que sus palabras me han hecho reflexionar. Su intervención está
traducida al español, pero si no se entiende inglés es muy incómoda de seguir,
ya que es muy larga y Phil habla muy rápido. Por ello, he hecho una traducción
libre de sus principales mensajes, que os cito a continuación:
Creo que el escepticismo está
evolucionando de una manera alarmante últimamente. No siempre, pero en algunos
casos el tono utilizado por los escépticos está degenerando. En vez de usar la
razón, que es la base del pensamiento crítico, se está abriendo paso el insulto
y el menosprecio, y eso no me parece bien. Déjenme hacerles una pregunta.
¿Cuántos de ustedes aquí presentes, han creído en algún momento de sus vidas en
OVNIs, religión, poderes mentales, magos voladores… lo que sea? Nadie nace
escéptico ¿verdad? Ahora respóndanme. ¿Cuántos de ustedes dejaron de creer en
esas cosas porque alguien se les plantó delante y les dijo que eran idiotas y
retrasados?
¿Cómo podemos convencer a una
persona de que no está razonando correctamente? Muchas veces cuando tratas de
hacerlo, y desacreditas una creencia (debunking), se obtiene justo el efecto
contrario y esta creencia se populariza más.
Es realmente irritante. Pero es que el mensaje que transmitimos no es
nada gratificante: no hay magia, no hay vida eterna, no hay una autoridad moral
en forma de figura paterna (Dios, seres extraterrestres que nos protegen…). Y
así no nos debe de extrañar que la gente prefiera la fantasía a la realidad.
Recibir regalos de los reyes magos o el viejito pascuero es más divertido que
recibirlos de los padres.
Por si fuera poco, los escépticos
y científicos solemos ser vistos como unos estirados asociales. Los creyentes
en cambio se enorgullecen de serlo. Incluso nuestra sociedad le da más valor a
la fe que a la duda. ¿Cuántas películas giran en torno a la fe? ¿En cuantas
películas el protagonista es un personaje que duda ante todo? La creencia es el
ideal más alto.
Y visto como está la situación,
¿quién demonios quiere salir a escena a dar un mensaje tan desagradable como el
que damos nosotros? Las posibilidades de que progresemos son muy bajas. A los
datos me remito: la religión sigue teniendo infinidad de adeptos más de 200
años después de la Ilustración.
El movimiento escéptico tiene una
tarea difícil por delante, y aunque todos tiremos con fuerza no lo hacemos en
la misma dirección. Pensemos un momento. ¿Cuál es el objetivo del movimiento
escéptico? La respuesta puede ser diferente para cada uno. En algunas ocasiones
me pregunto si estos objetivos son razonables. ¿Podemos eliminar la
pseudociencia? La experiencia dice que no. Si alguna creencia se consigue
erradicar, este espacio será ocupado por otra nueva creencia. En mi caso
particular, mi objetivo no es erradicar la pseudociencia, sino enseñar a pensar
a la gente y enseñarles a usar la razón cuando quieran reflexionar sobre algo.
Pero hay que hacerlo con cuidado. Un martillo te puede servir para clavar un
clavo, pero si se maneja con rudeza puedes destrozar la pared. En muchas
ocasiones es mejor dar golpes pequeños pero bien enfocados.
Últimamente nos estamos perdiendo
en las discusiones, en las que se etiqueta a la gente con insultos. Hay gente
tan metida en su papel de escéptico, que ni siquiera se cuestiona sobre su
propia posición. Los egos están tan fuera de control que incluso llegan a
desplazar a la propia lógica.
Recordad que tenemos todo en
contra. Los creyentes son muchísimos más que nosotros y el cerebro humano está
preconfigurado para la fe, y no para el pensamiento crítico. Se necesita mucha
práctica para cambiar ese funcionamiento. ¿Cómo podemos conseguir nuestro
objetivo? La respuesta es: comunicándonos. Y en este punto, nuestro
comportamiento, la manera en la que entregamos este mensaje, es crucial.
Volviendo a la pregunta que os hacía al principio, en mi caso no recuerdo el
momento en el que dejé de creer y me convertí en escéptico, pero no fue de un
día para otro. Fue algo gradual en el que poco a poco me fui convenciendo de
que mis creencias estaban equivocadas. Si alguien se hubiese plantado delante
de mi cuando tenía 13 años y me hubiese dicho que era un imbécil y un
retrasado, quizá ese proceso no hubiese ocurrido.
Cuando estos insultos se
producen, en muchas ocasiones se debe a la frustración. Los escépticos como yo,
que hemos luchado contra la irracionalidad desde hace bastante tiempo, sentimos
frustración cuando vemos los mismos argumentos erróneos reaparecer una y otra
vez. Y ese sentimiento si no se controla lleva a la descalificación. Quizá eso
te haga sentirte superior en ese momento, pero no ayuda a conseguir el objetivo
final. Cuando alguien es atacado se pone a la defensiva, y esa no es la mejor
posición para ser receptivo y racional. No vas a conseguir que alguien cambie
de opinión de esa manera.
En tiempos de guerra se necesitan
guerreros, pero esto no es una guerra. No tratamos de vencer a un enemigo.
Estamos tratando de hacer entrar en razón a otros seres humanos. Y para hacer
esto no necesitamos guerreros, necesitamos a diplomáticos.
En algunos momentos de la charla
he sentido rubor, ya que yo mismo he protagonizado en alguna ocasión intervenciones
de este estilo. Cuando arranqué con el blog, quería que este fuese un espacio
abierto a todos, en el que se pudiese discutir sobre creencias, historia,
ciencia y magia. Quizá en aquel momento fuese bastante ingenuo, cosa que noté
en cuanto los primeros comentarios hostiles y amenazantes empezaron a aparecer.
Seguramente eran a consecuencia de la temática tratada, ya que analizaba y
desmontaba las afirmaciones hechas en otros blogs. En cualquier caso, y después
de tres años escribiendo aquí, me encuentro con que tengo que pararme a pensar
la respuesta a la pregunta de Phil Plait. ¿Cuál es el ahora el objetivo de este
blog? Sin duda mi objetivo es parecido al de Phil: ayudar a la gente a usar la
razón. Pero en muchos casos creo que mi esfuerzo no ha ido completamente en
esta dirección. Habrá que tenerlo en cuenta en el futuro.
Tomado del Blog La Mentira está afuera
Tomado del Blog La Mentira está afuera
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